Más de la mitad de la población mundial está migrando a las ciudades desde 2007, y se espera que esa cantidad aumente hasta el 60% para 2030; según cifras de la ONU.
En los países subdesarrollados la urbanización y la sobrepoblación están causando mayor pobreza, hambre y muertes en ciertas zonas urbanas donde hay más gente y existe menor saneamiento. Los edificios y las casas se están sobrecargando por el número de personas viviendo en un mismo espacio; asimismo la infraestructura de transporte que ya ha alcanzado la sobresaturación en cualquier punto de la CDMX, por lo que existen fallas en el transporte público que terminan en tragedias.
El 95% de la expansión de los terrenos urbanos en las próximas décadas tendrá lugar en el mundo en desarrollo; debido a ello se necesita invertir más en infraestructura sostenible en los países de LATAM que pueda ser más eficiente y más rápida en los traslados; donde exista más espacio para que quepa más gente y que tenga todo lo necesario en un mismo lugar para que pueda mejorar la calidad de vida de las personas.
Para eso se necesita infraestructura acreditada, que cumpla con todas las normas necesarias para ser de calidad, que tenga un modelo sostenible y resiliente a largo plazo.
Infraestructura innovada con alternativas de ciertos materiales contaminantes como el concreto y el acero por materiales y productos biodegradables, reciclados y ecológicos para mejorar la calidad del medio ambiente.
Transporte público innovado y a la vanguardia para alentar el uso del mismo y reducir la contaminación que deteriora la salud y afecta la productividad de los trabajadores lo cual impacta en la economía; al igual que reducir tantos coches que producen tráfico, disturbios e inseguridad.
Es imprescindible que los políticos y los empresarios trabajemos en conjunto para impulsar reformas de infraestructura sostenible que generen beneficios en términos de actividad económica, calidad de vida y medio ambiente para una ciudad intercomunicada.
Katya Harfuch, CEO de Industrias AlusheOrg